Ética y Buenas Prácticas

Podriamos definir Buenas Prácticas en Atención a Personas con Alzheimer, aquellas que van acordes con el nivel de conocimiento científico-técnico, en una estructura de Asociacionismo donde la humanización, el apoyo y el cariño son el hilo conductor. Respondiendo a necesidades sociales y como siempre adecuandonos al nivel socioeconómico disponible. En un servicio Público de Salud hay que tener una dimensión universal y de justicia social. Todo ello en un contexto ético de respeto a las personas diagnosticadas de Alzheimer y a sus cuidador@s. A. López

domingo, 21 de septiembre de 2014

21 de Septiembre: Día Internacional del Alzheimer

Más me hubiera gustado anunciar que desaparece este día en el calendario Internacional, y anunciar un Tratamiento definitivo para esta enfermedad.
Las investigaciones concurren desde todos los países, la enfermedad de Alzheimer no tiene fronteras.
El número de diagnosticados aumenta y las familias cuidadoras piden ayuda institucional, desde este pequeño rincón y con la colaboración de Ceafa, se ha dado información del Post:


7 datos para concienciar en el Día Mundial del Alzheimer

 
Una vez que el Alzheimer ha mostrado los primeros síntomas, la familia tiene un papel fundamental para ayudar a ralentizar la evolución de esta enfermedad incurable que este domingo celebra su Día Mundial. Este mal se caracteriza en su forma típica por una pérdida de la memoria inmediata y de otras capacidades mentales.
Aquí tienes 7 datos que muestran la magnitud de este mal.
1-. Más de 600.000 personas sufren esta enfermedad en España y se calcula que unos 200.000 enfermos están sin diagnosticar, según la Sociedad Española de Neurología. En el mundo, afecta a 44 millones de personas.
2-. En España se diagnostican cada año unos 40.000 nuevos casos de Alzheimer.
3-. El número de afectados por esta enfermedad aumentará de forma muy considerable en las próximas décadas, hasta el punto de que en 2050 podrían existir más de 1,5 millones de personas afectadas en España. Esta tendencia responde al envejecimiento de la población propia de las sociedades desarrolladas, ya que se trata de un desorden neurodegenerativo progresivo ligado a la edad.
4-. La enfermedad genera un gasto anual cercano a los 36.000 millones de euros en España, una cifra que se duplicará en los próximos veinte años en sintonía con el mismo incremento que se prevé que registre el número de afectados
5-. Un paciente con Alzheimer necesita, de media, unas 70 horas semanales de cuidados y, en la mayoría de los casos, sobre el 80%, los responsables del cuidado del paciente suelen ser los familiares.
6-. El 50% de los pacientes son mayores de 85 años.
7-. En la actualidad no existe un tratamiento eficaz contra el alzhéimer, cuyos ensayos clínicos han fracasado en un 99,6%, según un estudio publicado por Cleveland Clinic.
 
Más también pedimos la colaboración del Crea de Salamanca, de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, de la Sociedad Española de Neurología, de todas las Asociaciones de Familiares y Cuidadores de enfermos de Alzheimer y de la Consejería de Bienestar Social y Salud para :
COMPROMETERNOS CON EL ALZHEIMER Y TRABAJAR CON LA FAMILIA
Cuyo Objetivo sea: - Potenciar la Investigación hacia                                     
  • Una Medicina Preventiva.
  • Un Diagnostico Precoz.
  • Atención Especializada.
  • Tratamientos No Farmacológicos.
  • Atención y Apoyo Domiciliario.
  • Profesionalizar los Cuidados
  • Políticas de Bienestar Social: Hacia el PACIENTE (Especificación de las Estancias Diurnas) y Hacia la FAMILIA (Estancia de Descanso)
  • Tarjeta "A tu Lado". Concienciación de toda la ciudadanía.
       ESTO NO ES UN TRABAJO PARA UN DÍA, NI PARA UN PROGRAMA BIANUAL, ES UN PROGRAMA PARA IR SUMANDO DÍA A DÍA: SUMATE TU TAMBIÉN.

sábado, 13 de septiembre de 2014

Detecta la enfermedad en las fases precoces de pacientes vivos, sin necesidad de autopsia diagnóstica



El servicio de Medicina Nuclear del Hospital General Universitario de Valencia (HGUV), en colaboración con el servicio de Neurología del Hospital Clínico Universitario de la misma ciudad, han realizado la primera prueba con PET (Tomografía por Emisión de Positrones) amiloide a un paciente de la sanidad pública.

Se trata de Amyvid (o Florbetapir 18F), el primer y único radiofármaco de diagnóstico capaz de detectar placas beta-amiloide (un hallazgo neuropatológico característico de la enfermedad de Alzheimer) sin necesidad de autopsia. Esta herramienta de diagnóstico visualiza, mediante imágenes PET, la densidad de la placa neurítica beta-amiloide en el cerebro de pacientes adultos con deterioro cognitivo que están siendo evaluados por este posible mal y otras causas de deterioro cognitivo. Exactamente, el radiofármaco se adhiere a las placas amiloides y se detecta mediante el uso de un escáner PET de imágenes cerebrales.

Según José Miguel Lainez, jefe del servicio de Neurología del Hospital Clínico Universitario de Valencia, “nos permite realizar un diagnóstico de la enfermedad en las fases precoces, incluso en pacientes con una mínima sintomatología”. Además, tal y como añade, “es bueno que se disponga de una herramienta como ésta en los hospitales de la red pública, lo que permitirá avanzar en el conocimiento y manejo de esta terrible plaga del siglo XXI”.

Para el diagnóstico definitivo de alzheimer se requiere la presencia de las placas beta-amiloide en una autopsia. Hasta la fecha no había sido posible ver realmente estas placas en pacientes vivos durante la práctica clínica rutinaria: Amyvid  permite que sean vistas en el cerebro vivo. En este sentido, José Miguel Lainez asegura que “esta técnica nos permite establecer el diagnóstico precoz de la enfermedad con una muy alta probabilidad, y con unas mínimas molestias para el paciente”.

Para José Ferrer-Rebolleda, “esta herramienta hará posible que los médicos puedan excluir el diagnóstico en pacientes que presentan alteraciones de memoria”. También permitirá, a su juicio, “que se seleccione adecuadamente a los pacientes que participen en ensayos clínicos para investigar fármacos dirigidos a las placas de amiloide”.
Amyvid también supone contar una herramienta de investigación que puede ser utilizada en estudios clínicos para monitorizar signos biológicos de alzheimer en el cerebro vivo y mejorar así el conocimiento de la progresión de la enfermedad.

martes, 9 de septiembre de 2014

Cómo funciona nuestra memoria y de qué manera podemos detectar el alzheimer


"Un tema que preocupa a los mayores cada vez más jóvenes. En esta nota, los secretos de la memoria".

El doctor Ricardo Allegri, jefe del Servicio de Neurología Cognitiva e investigador del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas), explicó las características de los distintos tipos de memoria y la señaló cuáles son los primeros cambios que se producen en una persona que padece de alzheimer.
 Según el especialista, existen tres tipos de memoria: la episódica, la semántica y la procedural. La memoria episódica es aquella que registra los hechos de nuestra vida, la semántica almacena los conceptos lingüísticos y culturales y la procedural se encarga de contener los procedimientos para hacer determinadas actividades, es decir, el "saber hacer".

 La memoria episódica permitiría recordar qué es lo que desayunamos una mañana, mientras que la semántica sería la responsable de que sepamos en qué consiste un desayuno. La procedural, por su parte, no da la posibilidad de recordar cómo preparar un desayuno.
 "(Las memorias) están en distintos lugares del cerebro, pero no es que están desconectadas. Están en con junto", explicó el doctor. "La memoria episódica es la memoria más primitiva. Tiene que ver con el hipocampo, que es la parte interna del lóbulo temporal. La memoria semántica, la memoria conceptual, tiene que ver con la parte externa, la más nueva del cerebro", detalló.

Sin embargo, el especialista señaló que las distintas memorias "se pueden alterar en forma a distinta una de la otra" ya que "una persona puede tener falla en la memoria episódica y le puede funcionar bien memoria semántica".

 En relación al alzheimer, enfermedad que afecta estas funciones del cerebro, Allegri detalló: "El alzheimer empieza a afectar la memoria reciente, empieza a tomar lo episódico, después lo semántico y luego los procedimientos". Por eso, algunos pacientes "no se acuerdan de lo que pasó hace media hora y sí se acuerda de su infancia".
 Por otro lado, respecto a la capacidad de algunas personas para retener más información, el investigador contó que: "hay una parte que viene genética y nosotros podemos mejorarla", explicación que el doctor hizo extensiva a todas las otras capacidades que poseemos las personas, además de a memoria.

 Por último, Allegri resaltó que "la memoria procedural es la que más se mantiene", por eso es más común olvidar ciertos nombres conceptos y no cómo andar en bicicleta, por ejemplo. El alzheimer se nota a partir de los cambios en las capacidades de la persona. Cuando una persona empieza a olvidar hechos que antes no, puede ser un indicador del comienzo de la enfermedad.

miércoles, 3 de septiembre de 2014

Trasplante de células cerebrales para revertir la pérdida de memoria en la enfermedad de Alzheimer




Unos científicos han trasplantado con éxito células progenitoras de neuronas inhibitorias a ratones viejos afectados por los problemas neurológicos propios de humanos de edad avanzada que han desarrollado la enfermedad de Alzheimer (EA) a partir de la variante genética apoE4, presente en cerca de un tercio de todos los individuos con EA de inicio tardío.

Esas células progenitoras son células cerebrales en una fase temprana de desarrollo que tienen la capacidad de convertirse en neuronas inhibitorias adultas, fundamentales para una adecuada regulación de las funciones cerebrales. Los investigadores trasplantaron las citadas células tanto a ratones con apoE4 como a ratones que además presentaban una acumulación excesiva de proteína β-amiloide. Los trasplantes ayudaron a reponer células en el cerebro, reemplazando aquellas perdidas por culpa del apoE4, regulando la actividad cerebral y mejorando la memoria y la capacidad de aprendizaje. El éxito del tratamiento en estos ratones viejos, que por edad equivalían a humanos ancianos, es particularmente importante porque constituye la franja de edad de los eventuales candidatos humanos a recibir el tratamiento si finalmente se valida y se aprueba para uso humano.

En conclusión, resulta prometedor haber logrado en los experimentos una correcta integración funcional de esas células en el 'circuito' del hipocampo y una remisión completa de los déficits de aprendizaje y memoria.

 [JNeurosci2014]
Tong LM, Djukic B, Arnold C, Gillespie AK, Yoon SY, Wang MM, et al.

lunes, 1 de septiembre de 2014

Hablaban los clásicos de 'mens sana in corpore sano'. Ahora, la investigación médica está demostrando que tenían razón. El neurofitness y cuidar de tu cuerpo pueden evitar el deterioro mental.



¿Qué produce el Alzheimer?, ¿Por qué a veces llega el deterioro cognitivo antes de lo que debería?
 La ciencia aún no sabe contestar a estas preguntas, pero sí ha descubierto factores en los que podemos intervenir para
prevenir algunas dolencias. Nuestro cerebro se adapta a lo que sucede en nuestro entorno: cada día se crean 1.400

neuronas nuevas. 

Esta plasticidad supone que podemos mantenerlo activo para que las conexiones se mantengan en forma y las células neuronales reciban lo que necesitan para no envejecer antes de tiempo. Hay actitudes y hábitos que pueden poner a punto tu mente. ¿Quieres saber cuáles? La Dra. Ana Frank, jefa de Neurología y coordinadora de la Unidad de Trastornos Cognitivos y del Comportamiento del Hospital La Paz de Madrid nos ayuda a descubrirlos. 

 
1. Cuida tus huesos 

La osteocalcina es una hormona que producen las células óseas y que llega por la sangre hasta el cerebro. En el embarazo es fundamental, ya que ayuda a formar las neuronas del feto y a que el hipocampo (sede del aprendizaje y la memoria) adquiera el tamaño adecuado. Pero después del nacimiento sigue siendo básica, ya que regula la producción de neurotransmisores y reduce los niveles de ansiedad y depresión. Para evitar un déficit, hay que mantener los huesos lo más fuertes posible con una exposición moderada al sol, una dieta rica en calcio y baja en sodio y realizando ejercicio de forma habitual. 

2. Vigila tu oído 

La mente de las personas mayores que no escuchan bien dedica gran parte de su energía al tratamiento del sonido, en detrimento de los recursos que debería emplear en la memoria y el pensamiento. Los mayores con pérdida de audición desarrollan un deterioro cognitivo hasta 3’2 años antes que los que oyen bien. Si ya se ha producido la pérdida auditiva, el simple uso de un audífono sirve puede mejorar ese trabajo cognitivo. 

3. Cuida la flora intestinal 

De ella depende qué neurotransmisores se encuentran más activos. Las resonancias magnéticas han demostrado que los cambios en la flora intestinal afectan a las regiones del cerebro ligadas a la afectividad y la cognición. Esto apunta a que una flora sana y abundante puede contribuir a reducir el estrés y fomentar la estabilidad emocional. Y para conseguirlo no pueden faltar en la dieta hortalizas y verduras frescas, frutas, cereales integrales y yogures. 

4. Aprende (y habla) otro idioma 

El grosor de la corteza cerebral y el volumen del hipocampo crecen más cuanto mayor es el esfuerzo por aprender un idioma nuevo. Además, las personas bilingües tienen más reservas cognitivas y menos riesgo de padecer demencia. La razón está en que usar dos lenguajes estimula las regiones del cerebro que son básicas para la atención y el control cognitivo. 

5. Habla contigo misma... en voz alta
 
No se trata de parecer una loca peligrosa, sino de sacarle partido a algo que seguramente ya haces sin darte cuenta, como repetir en voz alta el nombre de una cosa mientras la estás buscando. Está comprobado que este sistema funciona, así como decir en voz alta una lección permite memorizarla mejor. Y hablar con una misma de forma positiva o motivacional reduce el nivel de estrés. Todo son ventajas.
6. Muévete a menudo 
El ejercicio favorece la capacidad de concentrarse, ya que incrementa la sustancia gris en las regiones que nos permiten planificar acciones y tener en cuenta los objetivos a largo plazo. La responsable de que mover los músculos beneficie al cerebro es la irisina, una proteína que produce el músculo durante el ejercicio y que refuerza el hipocampo. 
7. Toma café 
La cafeína mejora la memoria hasta 24 horas después de haberla consumido. Eso sí, no más de dos tazas diarias: si tomas demasiada, aparecen síntomas parecidos a los de un ataque de ansiedad. 
8. Ojo al colesterol 
Unos niveles elevados te hacen ser 10 veces más propensa a padecer deterioro cognitivo leve. 
9. Mantén baja la presión arterial 
La tensión alta provoca daño estructural en el cerebro de las personas jóvenes, favoreciendo que se produzca, con la edad, deterioro cognitivo. Daña las arterias del cuello cerebral, con lo que no llegan suficiente oxígeno y nutrientes, y puede aparecer una demencia vascular por deterioro mental prematuro. 
10. Duerme bien 
Diversos estudios con resonancia magnética han mostrado que a las personas con insomnio les cuesta activar determinadas regiones del cerebro necesarias para la memoria de trabajo –la que sirve para mantener una conversación, realizar operaciones aritméticas o leer–. Además, dormir poco reduce el volumen cerebral y disminuye el desempeño cognitivo, ya que el sistema nervioso envejece antes. Para los adultos, al menos siete horas al día son necesarias para un óptimo rendimiento cognitivo.
 
Y, además, estos son los tres enemigos de las neuronas 
- Diabetes e hipertensión. Las personas de entre 40 y 64 años con estas enfermedades tienen el doble de riesgo de sufrir deterioro cognitivo. 
- Estrés y tabaco. El primero produce hipertensión y altera el sueño. El segundo duplica las posibilidades de desarrollar una demencia senil. 
- Alcohol. Si te emborrachas, las neuronas esenciales para la memoria y el aprendizaje se desactivan para evitar estar expuestas a él. El alcohol interfiere en los receptores del hipocampo, lo que acaba generando “apagones” neuronales que producen las amnesias del día después. 
 
10 alimentos que te ayudarán 
● Chocolate negro. Además de contener una pequeña cantidad de cafeína, a través del flavonol epicatequinia incrementa el flujo de sangre al cerebro. 
● Arándanos. Contienen un flavonoide, que se asocia a menor riesgo de sufrir enfermedad cardiovascular, al evitar la hipertensión. 
Pescado azul. Es rico en ácidos grasos omega-3, que ayudan a la memoria y previene enfermedades degenerativas. 
Frutos secos. Son una fuente de vitamina E que retrasa la aparición de la demencia, mejora la actividad neuronal y preserva la memoria. 
Cereales integrales. La deficiencia de ácido fólico parece relacionada con una mayor probabilidad de demencia. Además, se convierten en glucosa al digerirlos, lo que garantiza un aporte continuado de “gasolina” al cerebro. 
Huevo. Su colina y luteína favorecen la memoria, el pensamiento y otras funciones cognitivas. 
Lino. Sus semillas tienen omega-3, que ayuda a formar EPA y DHA, protectores de las neuronas. También son ricas en omega-6, que contribuye al sano desarrollo del cerebro. 
Semillas. Las de sésamo son precursoras de melatonina y serotonina, que se relacionan con el buen humor y el aprendizaje. Las pipas de girasol tienen grasas poliinsaturadas, vitamina E, ácido fólico y flavonoides que previenen enfermedades cerebrales. 
Brécol. Contiene vitaminas antioxidantes y folatos, beneficiosos para la memoria. Mejor si se toma al vapor o crudo en ensalada. 
Y un plus de agua. El 90% del peso del cerebro se debe al agua que contiene, por eso es un órgano especialmente sensible a la deshidratación. 
 
Cuida tus emociones 
La doctora Ana Frank explica que el ser humano es su cuerpo y el entorno en que éste se desarrolla y se cuida. “Si una persona con un cerebro sano vive en un ambiente estresante y negativo, tiene papeletas para desarrollar hipertensión arterial, pero si vive en un ambiente que favorece la plasticidad neuronal positiva, que el cerebro se desarrolle y se mantenga sano, se está haciendo una prevención del deterioro cognitivo”. ¿Qué recomiendan al respecto las investigaciones científicas? 
- Socializa. Hablar con otras personas 10 minutos al día mejora la memoria tanto como leer o hacer un crucigrama. 
- No te enfades. En las dos horas siguientes a un arrebato de ira aumenta un 3’6% el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular. 
- Ríete. Al hacerlo liberamos endorfinas que reducen el cortisol, la hormona del estrés. Además, se acelera el ritmo cardiaco y se expanden los pulmones, con lo que todo el cuerpo –cerebro incluido– se oxigena mejor. Las personas con sentido del humor tienen menos infartos y viven cuatro años y medio más de media. Se ha demostrado que la risa provoca ondas cerebrales similares a las que se logran al meditar.
MUJER HOY-Sara Borondo